El orden de los animales en el zodiaco chino

Hay muchas versiones del orden de los animales del horóscopo chino, pero es una combinación de astrología con ciertas similitudes al zodiaco occidental y veneración por animales.

La historia comienza con el Emperador de Jade, un ser inmortal, quien quería seleccionar 12 animales para que fueran sus guardias, lo que se definiría con una carrera que terminaría en la Puerta Celestial.

La rata, ansiosa, se levantó temprano para la carrera, hasta que llegó a un arroyo con una fuerte corriente. Después de un largo rato vio al buey y sin pensarlo se acomodó entre sus orejas para cruzar el arroyo.

Al llegar a la orilla, la rata salta y corre hacia el Emperador, quien lo nombra primero en la carrera.

El confiable buey, no le guarda rencor a la hábil ratita, y acepta sin reparos su segundo lugar.

El tercer lugar lo tomó el tigre, dejando al conejo en cuarto lugar gracias a su velocidad. Ambos de espíritu competitivo, el versátil tigre eligió nadar con todas sus fuerzas mientras que el elegante conejo fue dando saltitos sobre piedras y troncos que lo mantuvieron a flote.

El dragón quedó en quinto lugar, más tarde de lo que esperaba el Emperador dado que puede volar, pero el confiado dragón se tomó su tiempo llevándole la lluvia a un pueblo que sufría de una sequía e incluso ayudó con su aliento a un pequeño conejo a mantenerse sobre un tronco mientras cruzaba un arroyo.

El Emperador le comenta al dragón que su hijo puede tomar el sexto lugar, pero el hijo no estaba ahí por lo que la astuta serpiente aprovechando su parecido con el dragón, se presenta como hijo adoptivo, por lo que quedó con el sexto lugar.

El amable caballo queda séptimo; algunas versiones de la leyenda dicen que la serpiente lo asustó cuando iba a todo galope totalmente enfocado en su meta provocándole una caída que demoró su llegada. Otras versiones dicen que el caballo y la modesta cabra cedían su lugar dejando al otro tomar el próximo lugar, por lo que el Emperador al observar la cortesía de ambos, dejó al caballo de séptimo y la cabra de octavo.

En el noveno y décimo puesto están el inteligente mono y el observador gallo. Se dice que el mono sorteó el arroyo saltando por árboles y piedras, pero también es aceptado que la cabra, el mono y el gallo privilegiaron el trabajo en equipo; el gallo construyó una balsa mientras que el mono y la cabra sacaron la maleza para poder avanzar, los 3 remando hasta llegar a la orilla cercana a la meta.

El penúltimo puesto lo ocupa el fiel perro, quien después de una larga carrera al ver el arroyo no pudo resistir darse un baño para refrescarse, perdiendo la noción del tiempo mientras jugaba en el agua.

El Emperador iba a dar por terminada la carrera cuando escucha un gruñido de un diligente chanchito, a quien en medio del evento no aguanta el hambre y se da un banquete seguida de una siestecita, despertando justo antes del fin de la carrera, para quedar en el doceavo y último puesto.

Les dejamos un hermoso video de china highlights